Si en un Mini normal no te cabe casi nada, llega la alternativa para tener un Mini y que puedas ir cómodamente se llama Clubman y reedita de nuevo otro éxito que el modelo original obtuvo en los años 60. En definitiva es el Mini familiar o Break. Es 24 centímetros más largo que el Mini normal llegando así a los 3,94 metros. Lo que más llama la atención es su puerta trasera adicional llamada Clubdoor que solo está en lado derecho del coche, incluso en la versión para Gran Bretaña por seguridad y casi camuflada ya que no lleva ni tirador. Mide 43 centímetros de ancho pero permite el acceso cómodo a la parte trasera. El Cooper S Clubman pesa 75 kilos más que la versión corta. Esta joya se pone a la venta el 10 de noviembre y llegara con tres motorizaciones, amplias posibilidades de personalización en el exterior y en el interior y más de 40 combinaciones de colores. La gama se articula en base a tres motorizaciones: un 1.6 de 120 CV, un 1.6 inyección directa con turbo de 175 CV y un Diesel de 1.6 de 110 CV. Los precios sufrirán un incremento con respecto al tres puertas de 2.150 Euros. En equipamiento de serie incluye ocho airbag, aire acondicionado, arranque por botón, el sistema star/stop de apagado automático del motor en retenciones o semáforos, radio mini CD, respaldos abatibles, neumáticos runflat o llantas de aleación. Todo un clásico que vuelve en versión larga. Más información en Mini. Desde Santiago de Compostela.
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