El Focus es uno de los modelos más emblemáticos de la marca, y no es para menos, ya que es su coche más vendido. Se lanzó en 1998 y supuso un importante paso adelante en cuanto a diseño, comportamiento y calidad. A esta tercera generación la podrías denominar en realidad segunda y media: aunque estrena frontal y pilotos, no se puede esconder una silueta demasiado conocida por todos nosotros. De todas formas el interior es muy parecido a la antigua generación. El motor cuenta con 136 CV y sigue siendo divertido de conducir, pasa por las curvas rápido y asentado y te permite salir en marchas largas de cualquier viraje sin demasiados problemas. Empuja con fuerza desde abajo y si fuera necesario recurrir a la caja de cambios no hay problema ya que su funcionamiento es suave y preciso, en parte gracias al uso de un aceite algo menos denso que le ha permitido ganar suavidad y precisión. La gran novedad llegará en primavera ya que Ford ofrecerá la posibilidad de montar la caja de cambios PowerShift. Detrás de esta denominación está el cambio manual robotizado de doble embrague que en el Grupo VAG se llama DSG. Como siempre, la familia Focus contara con la carrocería de 3 y 5 puertas, además de la familiar, aunque hacia la primavera se lanzará el sedán y el coupé-cabrio. La oferta de motores de gasolina va desde 80 a 225 CV y en diésel de 90 a 136 CV. Más información en Ford. Desde Santiago de Compostela.
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