Su vida fue corta solo once años pero los resultados obtenidos por sus derivados en competición sirvieron para que la tracción total de Audi pasara de ser algo totalmente desconocido a convertirse en un plus de seguridad deseado y en constante progresión desde entonces. Audi lo lanzaba en el año 1980 y era un coupé con dos puertas y cinco plazas que incluía un árbol de transmisión primario que trasmitía a los dos ejes la fuerza motriz, que era distribuida entre ellos por un diferencial Torsen. Para ver como se desarrollaba y difundir sus virtudes Audi metió este modelo en la competición. Los rallyes vieron entre 1982 y 1984 el dominio absoluto del Audi Quattro. La denominación Quattro sugerida por Walter Treser se asocio a una carrocería derivada del Audi 80 Coupe y el conjunto fue motorizado por un propulsor de cinco cilindros en linea de 2.144 cm3 y sobrealimentado por turbocompresor cuyo rendimiento era de 200 CV. Este modelo se fabrico hasta mayo de 1991 y fueron vendidas 11.452 unidades. En 1984 apareció la versión Sport con un motor sobrealimentado que rendía 306 CV, de este modelo Sport solo se fabricaron 224 unidades. Todo un recuerdo para esté vehículo que trajo la tracción total que aun hoy Audi utiliza en sus modelos. Desde Santiago de Compostela.
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